Cerati


Con respeto, cariño y admiración a un grande:
¡Aún te esperamos!
También, con el mismo cariño, para Valentina
Cariños eternos para ti, Vale

Despertó.
Últimamente los días y las noches se parecen demasiado. Si algo aprendí en esta ciudad es que no hay garantías, nadie te regala nada. Todo podía terminar terriblemente mal, pero en este caso había que resolverlo.
Abrió los ojos mientras un aroma sobrecargado de vacío, tiempo y vida se tornaba espesa en aquella habitación. Nunca comprendió el paso cruel de ese tiempo que en un abrir y cerrar de ojos te puede llevar a dos mundos paralelos. Dos mundos que son separados por el centro de una oscuridad llena de angustia y desesperanza desencontrada.
La espera me agotó, no sé nada de vos, dejaste tanto en mí...♫
Al abrir el telón de su obra comprendió que todo había cambiado. La música había dejado de sonar, el tiempo no se detuvo y la gente que lo acompañaba había desaparecido. La desesperanza, a veces, se dijo a sí mismo, puede ser brutal cuando se mezcla con el olvido y el paso del tiempo.
En un abrir y cerrar de ojos quizás habían pasado siglos.
Alguien me ha dicho que la soledad se esconde tras tus ojos...
Trato de mirar de un lado hacia otro buscando respuestas a ciertas preguntas que de golpes desprolijos se enfrentaban con él. Quizás antes había encontrado la respuesta a sus preguntas, pero de pronto cuando uno tiene todas las respuestas nos cambian las preguntas y nos mandan por un espacio largo y desconocido. Ese espacio que lo tenía en la incertidumbre del tiempo.
No quiero soñar mil veces las mismas cosas...
Cuando su mente se quedó por un pequeño instante en silencio -llevaba bastante tiempo en silencio y tenía miedo al silencio prolongado- escuchó el latir de su corazón. Con un ritmo descoordinado, apasionado y lleno de una vida nueva, de esas segundas oportunidades. Definitivamente sí, definitivamente estaba viviendo. Su corazón latía.
Hay algo oculto en cada sensación...♫
Latía.
Oh, mi corazón se vuelve delator...
Latía con más fuerza, con esa fuerza infrenable, descontrolada, arrítmica, que llenaba todos los vacíos.
Un suave látigo / una premonición / evocan llagas en las manos / un dulce pálpito...
Había abierto los ojos como la apertura de tanta espera difundida en muchas palabras expresivas con un fondo lleno de música.
Había despertado, como un arte que se manifiesta frente a una multitud en éxtasis. Había despertado como tal Padre Poderoso creador de una música trascendente.
Lo cierto es que había despertado. Había despertado para nunca más cerrar sus ojos trascendiendo y transformándose así en una leyenda viviente. El crimen estaba resuelto: él había despertado mientras la habitación se llenaba de gritos de locura y llanto por la vuelta, o quizás ida, de un grande.


El tema que me inspiró...

Comentarios

Publicar un comentario

Entradas populares