Espíritus

Sentí el apretón en mi estomago, súbito.
El aire se sentía espeso, como si una niebla pesada no dejara avanzar. Fácilmente un cuchillo cortaba el ambiente. Algunos sonidos sordos se escuchaban a lo lejos. El silencio era el rey en un imperio de mentiras, de miedos, de violencia. Cada persona era un espíritu en un hogar que fue. De a poco va desapareciendo, una estirpe que se extingue. No se extingue por lo senil que puede ser, se extingue porque la vida lo quiere. Se extingue porque las personas quieren. Las miradas son fierros calientes que penetran en el corazón, al contacto hieren, se introducen sin mayor dificultad y posteriormente sangra. Deja huella.
La casa es un cementerio, un cementerio de historias que con el tiempo se transforman en vanales.
El rio de las mejillas no aparece, no logra liberar mi pecho. El miedo persiste como si no quisiera soltar mi abdomen. El nudo no deja pasar el flujo. El llanto no quiere salir. No debe salir. En casa con espíritus vivientes, no.
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<< Qué maneras más curiosas
de recordar tiene uno,
qué maneras más curiosas:
hoy recuerdo mariposas
que ayer sólo fueron humo,
mariposas, mariposas
que emergieron de lo oscuro
bailarinas, silenciosas >>
[ Silvio Rodríguez; Mariposa ]

<< ¿Te molesta mi amor?.
Mi amor de juventud
y mi amor es un arte de virtud
¿Te molesta mi amor?
Mi amor sin antifaz
y mi amor es un arte de paz >>
[ Silvio Rodríguez; ¿Te molesta mi amor? ]